Mes de enero, tiempo de exámenes universitarios, tiempo de inicio de carnaval... pero también de fútbol. Hoy es lunes 16 de Enero y queda tan solo 5 días para poder ver después de 3 años un nuevo derbi sevillano. 3 años son muchos sin poder advertir la magia de un partido así, diferente y especial donde los haya. Sevilla entera se engalana para la ocasión y se divide en un agradable aroma de intensa rivalidad y tradición balompédica. Siempre es especial poder llegar a presenciar un partido como esos, poder vivir el día a día de esa semana con tus amigos del equipo rival o simplemente picarte con cualquiera de una forma sana, porque eso sí hablamos de fútbol no de la Tercera Guerra Mundial.
Una mitad verde y blanca y la otra roja y blanca en una ciudad con ansias de derbi, con ganas de disfrutar de la fiesta del fútbol sevillano. Ese fútbol sevillano castigado por las altas esferas de la RFEF y que tiene que estar unidos por el equilibrio de la liga en cuestión de repartos televisivos, que tanto difieren de las otras grandes ligas europeas.
Por eso y a pesar de esa rivalidad somos equipos hermanos, y por ello hay que abogar por la rivalidad sana, por ese pique entre familiares y amigos del otro equipo pero siempre con el respeto que se merece y nunca con la violencia como ha habido en multitud de derbis allá por los 90. Esperemos que ese espíritu sea el que impere el sábado en el Benito Villamarín a las 10 de la noche. Y bueno dicho esto solo me queda decir VIVA EL BETIS y QUE GANE EL MEJOR.